LA CONFIANZA ES la base de todas las relaciones humanas y por supuesto lo es también en la pareja. En realidad, cuando una pareja se rompe lo que realmente se ha roto es la confianza que hemos depositado en otra persona para continuar con un proyecto de vida en común.
¿Cómo funciona la confianza?
La confianza se gana, se construye como una montaña de arena granito a granito, con el paso del tiempo y aunque puede perderse en solo un instante, lo habitual en las relaciones sentimentales se pierda poco a poco, con decisiones tomadas unilateralmente y otras pequeñas «traiciones» a ese camino que un día decidimos hacer junto a tu pareja. Si alguien dedica demasiado tiempo a su trabajo o muchas tardes a la semana a practicar deportes u otra actividad en la que la compañero o compañera de vida no esté incluida, es posible que pierda la confianza en seas la idónea para acompañarla en el camino de la vida. Simplemente, la seguridad y el valor se han perdido. También es habitual que la ruptura se dé tras varios avisos y conatos de ruptura.
Cuando ocurre es difícil dar marcha atrás, sobre todo porque las emociones nos alteran y pedimos o exigimos de inmediato una nueva oportunidad, y ese no es el camino. Para dar marcha atrás a este proceso es imprescindible que quién ha decidido romper dé la oportunidad de probar si realmente los cambios que se prometen son verdaderos. El que sufre la ruptura está convencido de que será capaz de cambiar aquéllas cosas que no gustaban y promete pasar más tiempo en casa y ocuparse más de los hijos o de las tareas domésticas, ¿pero cómo demostrárselo si no vivimos juntos?
Sencillamente, no podemos hacerlo e insistir puede ser contraproducente. A lo largo de estos años, en mis consultas de psicología del coaching para recuperar una pareja, me he dado cuenta que uno de los factores que produce la falta de confianza es, precisamente la insistencia. En realidad lo que impide que tu pareja vuelva a confiar en ti es la falta de calma y el estrés, que te convierten en alguien alterado y por tanto en en quién no confiar. Si trasmites angustia en las conversaciones con tu pareja no confiará en ti por la sencilla razón de que no te cree. Además, ya sabes que el exceso de celo desenmascara al traidor, de modo que si juras una y otra vez que cambiarás en todo y lo haces trasmitiendo inseguridad y falta de madurez tu pareja creerá que se trata de sólo de una excusa.
¿Cuál es el camino entonces, para volver a recuperar su confianza de tu ex?
Sencillamente hacer sólo lo que tienes que hacer (esto en cada caso es diferente, claro) y no pretender volver a la relación justo donde la dejaste. Es decir, primero debes volver a tener una relación personal o sea, ganarte su confianza para volver a ser amigos, dar un paseo, tomar un café… Ya sé que no quieres ser amigo de tu ex, que prefieres olvidar a esa persona si es que sólo vais a ser amigos; se trata sólo de un escalón en la escalera de ascenso en la confianza, que culminará si sale bien con el restablecimiento de la relación sentimental. Es muy importante que en este periodo reconozcas las etapas de la ruptura de pareja, (también hay post dedicado a este importante asunto de las etapas en la ruptura) y así puedas establecer una especie de calendario en tus llamadas, mensajes o actuaciones para volver con tu ex.