INTERESANTE CONVERSACIÓN con Tal Ben-Shahar sobre cómo usar las emociones a modo de brújula para tomar mejores decisiones y construir más bienestar en la vida cotidiana.
| CONTENIDO DE ESTE ARTÍCULO |
| 1. Emociones: de enemigas a brújula interna
2. El modelo «Evento–Explicación–Emoción–Acción» |
1. Emociones: de enemigas a brújula interna
No existen emociones «buenas» o «malas», sino más bien sensaciones agradables o desagradables que traen un mensaje. Durante años nos enseñaron a negar, reprimir o disfrazar lo que sentimos para encajar, pero eso nos desconecta de nuestro propio GPS emocional. Recuperar el vínculo con las emociones implica escuchar el cuerpo, nombrar lo que sentimos y preguntarnos qué está señalando: qué necesito cuidar, cambiar o poner límite.
El objetivo no es controlar las emociones, sino entender su función para responder mejor a la realidad, en vez de reaccionar en automático.
2. El modelo «Evento–Explicación–Emoción–Acción»
Tal Ben-Shahar propone un modelo sencillo: primero ocurre algo en tu vida; después viene la explicación o historia que nos contamos; de ahí nace la emoción, y finalmente la acción que tomamos.
La clave es que el evento es neutro: lo que realmente genera la emoción es la interpretación. Cambiar la narrativa transforma cómo nos sentimos y cómo actuamos. Si vemos una situación solo como pérdida o amenaza, aparecerán miedo, rabia o resentimiento; si encontramos también aprendizajes u oportunidades, surgen esperanza, gratitud o calma. Aprender a revisar conscientemente las historias que nos contamos abre espacio a respuestas más libres y coherentes.
Esto forma parte de las enseñanzas el estoicismo. El filósofo griego Epícteto, que vivió en Roma durante el primer siglo de nuestra era, ya nos decía que lo que nos ocurre en la vida no nos afecta: nos afecta cómo nos estamos contando lo que nos ocurre.
3. Emociones para tomar decisiones
En la parte más práctica, invitan a tratar las emociones como información útil. Primero, darles nombre y validar lo que sentimos sin juicio. Segundo, preguntar: «¿Qué me quiere decir esta emoción sobre lo que necesito ahora?». Tercero, diseñar acciones pequeñas que honren ese mensaje: poner un límite, pedir ayuda, descansar, cambiar una conversación o ajustar expectativas. También recomiendan cultivar emociones agradables con intención —por ejemplo, un portafolio positivo con recuerdos, frases, música e imágenes que despierten gratitud, calma o alegría— y usarlo a diario unos minutos para entrenar al cerebro hacia estados más constructivos.
4. Tal Ben-Shahar: usar las emociones para ser más felices
¿Qué papel juegan las emociones en tu vida diaria y cómo puedes utilizarlas a tu favor? En este video, Renata Roa conversa con Tal Ben-Shahar, una de las máximas autoridades en la ciencia de la felicidad. No te lo pierdas.





